Teníamos pensado ir a la misa de los jóvenes por la tarde, pero hoy juega España, así que iremos a la misa de los niños. La verdad es que es muy gratificante ver como los niños quieren acercarse a nosotros, no paran de mirarnos y a la hora de la paz provocamos una cola larga. Salimos y en la puerta se habla con algunos conocidos, tanto adultos como niños.
El trío tatatá va con Alejandra a dar la comunión a algunos enfermos. Sólo ven a una familia y se quedan jugando con algunos niños que los invitan a hacerlo. Los demás nos quedamos en casa haciendo la colada, preparando cosas, … A los chicos se les va a caer el pelo, pasa de largo la hora de comer y no están aquí. ¡Que va, no pasa nada!
Comemos espaguetis, algunos le echamos pique, no saben lo que hacen.
La comida se alarga hasta más de las cuatro y media.
Florette vuelve a casa.
El trío lalalá junto con Carlos y Alejandra nos vamos al hospital de Soubum a ver a madame Justine. Bajamos la colina, y nos subimos en moto-taxi, ¡vaya control con las motos! 150 francos cada uno (unos 22 cts) y al llegar un mototaxista le propone matrimonio a Ángela. Ella dice que está casada con Dios. Bueno, ya tenemos casadas a dos de las niñas. Pero las risas se convierten en pena, desolación, extrañeza, …, miles de sentimientos y pensamientos recorren nuestra cabeza cuando entramos en el hospital. Y es uno de los más limpios. Gente tumbada en los bancos, las habitaciones compartidas dando igual el sexo del enfermo, un calor que mataría a cualquiera de ellos y que hace que se propaguen los virus, las colchonetas finas como el papel, las ollas de comida que los familiares les llevan en el suelo. Nada hace ver que esto sea un hospital, bueno sí, ahí hay un goteo de suero bastante oxidado. Rezamos con ella, da gracias por todo. Volvemos y nos miramos sin decir nada, luego comenzamos a dar nuestras impresiones (chorreando de sudor como nunca). Volvemos andando y preguntamos por el precio de la pintura con la que pintar los colegios, al menos los bajos.
El resto estamos en casa.
Preparamos unos bocadillos de paté para la hora del partido, hoy tendremos refrescos y un par de cervezas. Todos estamos emocionados, la gente por la calle nos da ánimos. Carlos nos prepara una pantalla gigante para ver la final, casi podemos tocar a los jugadores. La emoción, los gritos, los “uyyyy” y por fin “goooooooool”. Que os voy a contar que no vivierais vosotros.
Nos acostamos con la alegría del deber cumplido por nuestros muchachos. Esperamos que con el nuestro también
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Por mucho que se cuente y mira que lo contais bien, es impresionante vivirlo en primera persona, allí, notando sus miradas... el cuerpo me da un vuelco...
ResponderEliminarEstais recibiendo gracias de todos, simplemente por escucharlos, por estar junto a ellos, gente más agradecida no la vais a encontrar. Y desde aquí mi apoyo y mi felicitación.
Muchos besos para tooooodos.
Tashi delek!
ResponderEliminar¡Y todavía hay gente que se queja de nuestra Sanidad Pública! Experiencias como estas nos ayudan a valorar lo que tenemos y a tratar de luchar por conseguir mejores condiciones para pueblos como el de Camerún, que están tan abandonados de las ayudas de los gobiernos occidentales.
Gracias, como siempre, por estar ahí, poniendo vuestro granito de arena y transmitiéndonos vuestros testimonios.
Saludos,
Alberto Ruiz
El partido fue tenso y emocionante hasta el final y la victoria merecida y justa aunq cuántas injusticias diarias presenciamos?demasiadas! pero q no decaiga el ánimo q juntos podemos!aunq los cambios son lentos... podemos conseguir un mundo más justo para todos y aunq a veces sitáis q los esfuerzos no son suficientes, vuestra entrega,la convivencia y la lucha diaria con ellos apartando las comodidades propias es motivo de alegría y agradecimiento!felicidades por vuestra entrega en todo lo q hacéis,abrazos y besos para tod@s
ResponderEliminarEsté donde esté carlitos siempre conseguirá una pantalla enorme y un buen sonido. Además es mago, no se como lo hace, cuando se aleja no funciona nada, cuando se aproxima funciona todo.
ResponderEliminarMuchos besos a todos