Jueves 5 de julio

La mañana transcurre con normalidad, pero ya hemos empezado el momento foto. Algunos alumnos van muy lentos y otros están casi a punto de terminar. Hoy no tiene pinta de llover. Claro, que aquí nunca se puede decir eso, del sol más reluciente pasamos a la lluvia más fuerte.

Vuelvo a casa con Olivier agarrado, y Theresa por detrás. Empezamos a preparar las tareas de la tarde. Hoy toca preparar el “ludó”, que es el parchís. Los niños lo fabrican y otro día se juega. Otro grupo juega al bingo. Tenemos que recortar papelitos para 90 niños. No pasa nada. Theresa y yo lo hacemos. El problema son las bolas que van saliendo, que no tenemos donde colocarlas. Seguro que todo sale bien.

Pues sí, todo sale bien, al menos para mí. Mucho follón, pero bien. A mí me gustaría ver a 80 o 90 de los nuestros en una clase metidos y en silencio. Me he hinchado de hacer globoflexia para los que ganaban el bingo. Muchos monitores parados. Les enseño como hacer alguna figura, pero parece que no pillan que es para los niños. Se hacen uno, y siguen parados. Bueno, es lo que hay. Yo sigo echando litros de agua por mi cuerpo.

En la evaluación siempre se le da vueltas a cosas sin importancia. Mañana juegos exteriores y pintura de caras para los más pequeños.

Hoy he visto a Michael y a Teresa Linares, las hijas de Joseph y Fló.

De vuelta a casa, un par de globos para Olivier, y clases con Theresa, interrumpidas muchísimas veces por más visitas. Unos a pedir, otros para hablar, …

Arriba está Cirille arreglando el ordenador, espero que esta noche haya Internet. Si es así, estaré leyendo todos vuestros anteriores comentarios y metiendo las demás entradas. Antes me ducharé, que no veas.

Besos y abrazos, hoy en especial para mi familia en Almería. Cristina, ya tengo la foto en mano de tu niña, y el domingo creo que voy a verla.

PD. Alejandro, sé que estás pendiente de tu tito, así que ya sabes, un beso por cada día que llevo sin verte.

Por cierto, todo muy bien.