Viaje de vuelta

Vuelvo al blog antes de lo esperado, pero nuestro viaje de regreso es para contar, como colofón a todo lo que nos ha pasado durante este mes.
Como ya contaron nuestros compañeros (ahiiiiiiii que os echamos de menos), en el aereopuerto de Doula nos encontramos con dos hermanas de otra congregación (MariCarmen y Theresa -camerunesa-) y con dos cooperantes que venían de la misma zona de selva que ellas. Enseguida entablamos amistad, y comenzamos la primera espera juntos. Salimos con dos horas de retraso, con lo cual vamos a perder en enlace de Casablanca-Madrid. Bueno, no pasa nada, así vemos algo de Casablanca. "De eso nada" -nos dicen, ya que hemos salido no nos dejan entrar hasta mañana. ¿Como vamos a dejar ahi a la hermana?. Diego habla con uno, con otro, pero no se consigue nada; sólo nos aseguran que la hermana tiene hotel y comida, y que tenemos que salir del aeropuerto. La hermana MariCarmen está muy nerviosa, no quiere dejarla allí, pero no hay más remedio, o nos vamos al hotel o dormimos en el calabozo. Así que está claro. En el hotel, Diego vuelve a solucionarnos todo, preocupándose por todos y por todo, al igual que María -"vaya para de tíos", me quito el sombrero ante los dos. El hotel a primera vista parece bueno, pero tiene mil detalles que te hace pensar en habitaciones calientes, en las que da la impresión de que alguién se acaba de levantar de tu cama. Cenamos, charlamos un rato y a la cama que el día ha estado tenso. Por cierto, no tenemos las maletas, nos han dicho que mañana embarcarán.

A la mañana siguiente nos levantamos temprano para ir al aeropuerto a solucionar lo de Theresa. Diego vuelve a intentarlo todo, entra donde no se puede entrar yhabla con todo el mundo. No hay nada que hacer hasta las doce. Volvemos al hotel, allí no podemos hacer nada. Estando en el hotel, unos compatriotas a los que les ocurrió lo mismo nos dicen que ellos sí tienen las maletas; pero a nosotros nos perjuraron que ... Bueno, rápido al aeropuerto de nuevo a ver que pasa. otro rato de lucha, un muchacho parece interesarse y se va con todas nuestras cosas a intertar solucionarlo. A los 45 minutos vuelve, nos da nuestras cartas de embarque (algo se soluciona) y nos asegura que nuestras maletas estarán en el avión. Pero, y la tarjeta de la hermana Theresa que está dentro. No nos dejan hacer nada, dicen que ella lo habrá solucionado desde allí. Que hasta las cuatro no podemos hacer nada. Vuelta al hotel, ya sin habitación,pero había que almorzar. Antes de las cuatro ya estábamos peleando otra vez. María y Maricarmen van a entrar y a intentar encontrar a la hermana Theressa. Nosotros, junto con Diego, claro, vamos a intentar encontrar nuestras maletas. No hay nada que hacer, se le ha preguntado hasta la última persona. Al final, Diego se inventa que hay una persona que está grave con la malaria y que es de vida o muerte que las maletas nos lleguen a Madrid en nuestro vuelo. Consigue que nos comprueben maleta a maleta que van en el avión. Ahora toca solucionar el billete de la hermana. Entramos, en el control me tocan hasta los ..., perdón, pero así ha sido (tendré cara de delincuente) y buscamos a los demás. "Mira, allí está sentada Theresa", a todos se nos iluminan los ojos. Está sola, entonces ¿dónde están María y Maricarmen? Lo importante es que está bien, pero no ha comido desde ayer; se encuentra tranquila, que paciencia que tienen estos camerunenses. Diego se va con ella a sacarle el billete, ella no lo ha canjeado, y nosotros en busca de nuestras otras dos compañeras de aventura. Por fin las encontramos, le explicamos como va todo y yo me voy a buscar a los otros. Por allí viene, todo solucionado.

Si no pasa nada, llegaremos hasta Madrid con las maletas. Así ocurre, que alegría, ya estamos en España.
Ahora me toca pelear a mí, de nuestro viaje a Málaga no se hace responsable nadie, es otra compañía y he llegado un día después. La gente es bastante amable, y tengo incluso que llorarle a alguna que otra operadora. Mientras Isa espera las maletas, yo hago el papeleo; nos menten en lista de espera, el vuelo está completo. No nos da tiempo casi ni a despedirnos de nuestros compañeros de viaje. Gracias por todo, no sabéis como os lo agradecemos; el destino hará que nos volvamos a ver, seguro.Sólo quedan 5 minutos para cerrar la facturación e Isa no aparece con las maletas, la busco y nos vamos corriendo, aquí no es, allí tampoco, allí corre, corre, otra vez a llorar. Conseguimos asientos, facturamos y tenemos exceso de equipaje. Además las maletas vienen chorreando porque se nos han reventado algunas papayas que llevábamos.Nuevas lágrimas y nos lo perdonan de nuevo. Nos dicen que corramos a la puerta de embarque, que tensión, parece que se va solucionando todo. llegamos, nos dan número de asiento y de vuelta a casa. Mal rato de Isa en el avión, pero ya estamos en Málaga. Salimos y allí nos están esperando los nuestros. Besos, lágrimas, abrazos y para la casa a limpiar las maletas y sacarlo todo, que esto ya huele a podrido.

Aquí ya sí se acaba nuestra aventura, allí siguen nuestros amigos, por favor seguid apoyandolos con los comentarios, son muy importantes en esas circunstancias.
Mis hermanas del colegio no paran de preocuparse por nosotros, pero estamos sin bateria en el móvil, así que no podemos llamarlas, además todo ha ido tan rápido al final.
Gracias de nuevo a todos, a nuestros amigos camerunenses, a los que nos habeis apoyado desde aquí, a las hermanas Misioneras por habernos dado la oportunidad de vivir esta esperiencia, a la Madre Nazaria por habernos protegido. Como dijo Alberto -cooperante de Ndong-Passi- "señor, cuida de los que queremos, y también de los que no".
Merci, merci.
2 R, cuidaros mucho y estamos con vosotros desde aquí, esto de escribir en el blog sin vosotros al lado no es lo mismo, no.
Besos y abrazos.