Llegamos a las 6:30 de la mañana. Ya todo es distinto. El aeropuerto, la gente, los colores, los olores. Está nublado. Parece que no hace mucho ha caído un buen chaparrón o que en cualquier momento va a caer otro.
Rellenamos un cartón de información para entrar al país, pasamos “la aduana” y allí están en el fondo las hermanas Piedad y Castillo esperándonos con una gran sonrisa. Vamos a por las maletas, y mucha gente quiere ayudarnos; que amables, o no, lo que quieren es que les demos dinero. Son muy insistentes, pero las hermanas se los quitan del medio con relativa facilidad. A nosotros nos hubieran timado bien. Cuando ya salen las maletas nos dirigimos a la calle, y nos intentan llevar las cosas hasta el coche, esta vez es más difícil sortearlos.
Nos ponemos en marcha… Ahora sí que todo es distinto, las calles están llenas de gente a pesar de la hora (llegamos a las 6 de la mañana, hora local y una menos que para vosotros), y la circulación nos resulta extraña. Muchas motos (taxis), mucha gente andando por la carretera, a los que hay que esquivar; creo que nosotros seríamos incapaces.
Poco a poco nos vamos acercando a Oyack, el barrio al que nos dirigimos; ya no hay asfalto, las casas son chambados de madera y chapa. En todos lados hay un puesto de algo, venden de todo o de nada. Y casi todos venden… El suelo está lleno de grandes agujeros, pero eso no le impide a la gente circular en moto por todos lados. Ahora viene la gran cuesta para llegar a nuestro destino.
Conforme pasan los segundos nos quedamos más sorprendidos. Llegamos a la casa y nos reciben con mucha alegría la hermana Florette y otras hermanas Tumi de clausura que estaban de paso. Nos enseñan la casa, desayunamos y subimos las maletas a las habitaciones.
Nos ponemos manos a la obra nada más llegar… programando nuestras posibles actividades, y así va pasando este primer día, bajo una gran lluvia.
Nuestro primer contacto con los niños es en la propia casa, ya que hay dos sobrinas de Florette y una de Françoise, que no paran de pedir juego. ¡Qué lastima no dominar el idioma! Sólo Rosario es capaz de comunicarse en condiciones. Siesta, trabajo, juegos con las niñas, cena y después de un rato todos juntos, a dormir y hasta el día siguiente.
Por cierto Mª José… no he podido felicitarte a tiempo… ¿todavía se puede? JOEUX ANNIVERSAIRE MA BELLE… Je t’aime beaucoup…
Rellenamos un cartón de información para entrar al país, pasamos “la aduana” y allí están en el fondo las hermanas Piedad y Castillo esperándonos con una gran sonrisa. Vamos a por las maletas, y mucha gente quiere ayudarnos; que amables, o no, lo que quieren es que les demos dinero. Son muy insistentes, pero las hermanas se los quitan del medio con relativa facilidad. A nosotros nos hubieran timado bien. Cuando ya salen las maletas nos dirigimos a la calle, y nos intentan llevar las cosas hasta el coche, esta vez es más difícil sortearlos.
Nos ponemos en marcha… Ahora sí que todo es distinto, las calles están llenas de gente a pesar de la hora (llegamos a las 6 de la mañana, hora local y una menos que para vosotros), y la circulación nos resulta extraña. Muchas motos (taxis), mucha gente andando por la carretera, a los que hay que esquivar; creo que nosotros seríamos incapaces.
Poco a poco nos vamos acercando a Oyack, el barrio al que nos dirigimos; ya no hay asfalto, las casas son chambados de madera y chapa. En todos lados hay un puesto de algo, venden de todo o de nada. Y casi todos venden… El suelo está lleno de grandes agujeros, pero eso no le impide a la gente circular en moto por todos lados. Ahora viene la gran cuesta para llegar a nuestro destino.
Conforme pasan los segundos nos quedamos más sorprendidos. Llegamos a la casa y nos reciben con mucha alegría la hermana Florette y otras hermanas Tumi de clausura que estaban de paso. Nos enseñan la casa, desayunamos y subimos las maletas a las habitaciones.
Nos ponemos manos a la obra nada más llegar… programando nuestras posibles actividades, y así va pasando este primer día, bajo una gran lluvia.
Nuestro primer contacto con los niños es en la propia casa, ya que hay dos sobrinas de Florette y una de Françoise, que no paran de pedir juego. ¡Qué lastima no dominar el idioma! Sólo Rosario es capaz de comunicarse en condiciones. Siesta, trabajo, juegos con las niñas, cena y después de un rato todos juntos, a dormir y hasta el día siguiente.
Por cierto Mª José… no he podido felicitarte a tiempo… ¿todavía se puede? JOEUX ANNIVERSAIRE MA BELLE… Je t’aime beaucoup…
Tashi Delek!
ResponderEliminar¡¡¡Por fin os deja la red enviar vuestras aventuras!!! ¡¡¡Quién iba a decir que las primeras desventuras fueran tecnológicas...!!! Bueno, creo que tod@s confiábamos en que estábais muy bien, pero siampre se agradece comprobarlo (¡¡Qué daño hizo el Apóstol Tomás, patrón de los desconfiados!!). Bromas aparte, me alegra mucho saber de vosotr@s, y que estéis comenzando a trabajar con tantas ganas.
Mis mejores deseos de que todo os vaya genial y que podáis disfrutar del encuentro con estas personas que tanto necesitan de vuestra entrega.
Mil besos...
Alberto
P.S.: Por cuestiones de analfabetismo informático aparezco dos veces como seguidor (he formateado el PC y se ve que ya no me reconoce). Ta pronto...
Hola Rosarito, Isa y Carlos, ya veo que el o a secretaria es muy fiel y nos encanta saber de vosotros.
ResponderEliminarNoostros en Formosa mucho mucho frío. Hoy hemos estado en una comunidad de aborígenes , preciosa la experiencia.
Por lo que decis no sabeis que prolongué mi estancia hasta el 28 para llegar a España 29 0 30.
Enseguidita nos encotramos, espero que celebremos el reencuentro. Besitos
Leo las sensaciones que habéis tenido a vuestra llegada, y revivo la primera vez que fui a Douala,igual.Mi amiga Dora y yo este año,si no pasa nada iremos por quinta vez consecutiva. Me alegro mucho qur hayáis conocido a las hermanas de Oyack, en especial a Piedad de Miguel, yo tengo la suerte de ser su sobrina y ahijada,de hecho llevo su nombre, os aseguro que es la mejor tia del mundo.
ResponderEliminar